lunes, 13 de octubre de 2008

Esta es otra parte de la traduccion que envia Patricia Panche:
El mandala Kalacatra como ejemplo

Existen diferentes tradiciones dentro del Budismo Tántrico, cada una con sus enseñanzas y ritos propios y diferentes de alguna manera. El repertorio de símbolos, deidades y mandalas es de igual manera extenso. El objetivo de la presente publicación no es presentar tantos mandalas del Budismo Tibetano como le sea posible, pues un amplio número de ellos ha sido divulgado en publicaciones japonesas e indias1. La segunda razón es que una compilación enciclopédica de esta magnitud debe dar cuenta de gran número de detalles, cuya utilidad es mínima al momento de entender el ritual mandala.

A pesar de las muchas diferencias las dos publicaciones más conocidas al respecto Teoría y práctica del Mandala de Giuseppe Tucci, y ‘Mandala’ de José y Miriam Argüelles, tienen una característica en común: lograron presentar un estudio sobre los mandalas con valides universal consultando material de las fuentes más variadas. Tucci dibujó su material desde los dos tipos de fuentes budistas e hindú, mientras que el material de Argüelles fue tomado de esferas diferentes a la asiática y la india. El análisis de mandalas y otras representaciones similares a estos por medio de un método comparativo de esta clase, que normalmente no tiene una idea convincente/clara sobre las particularidades individuales de las tradiciones mandala es típico de muchos de los ensayos y unas cuantas/pocas de las publicaciones principales sobre este tema/al respecto.

En este libro hemos escogido deliberadamente otro procedimiento. Nos concentramos principalmente en un único ritual mandala, aunque no sin consultar otras tradiciones aquí y allá.
Este es el ritual mandala de Kalacatra (dus kyi 'khor lo) que pertenece a la clase más alta de Tantra, el Anuttara-yoga Tantras. Fue seleccionado porque el autor mismo lo ha experimentado y ha recibido autorización para documentar ampliamente y en detalle a este respecto, desde los rituales preparatorios, pasando por la producción del mandala en polvo colorido, hasta la iniciación y desarme del mandala; y tambien porque recientemente/en los últimos años han aparecido importantes publicaciones sobre el ritual Kalacakra realizadas por muchos lamas tibetanos.

Las declaraciones referentes inicialmente al mandala Kalacakra no aplican siempre a otros mandalas. Existen diferencias no sólo en la estructura básica del mandala, sino también en enseñanzas básicas importantes. Sin embargo para evitar posibles confusiones es conveniente mencionar aquí que el yogin de la tradición Kalacakra trabaja únicamente con el momento de la muerte y la resurrección/renacimiento/el renacer no con los estados intermedios (bar do), en otras palabras el Kalacakra Tantra no se preocupa por el cuerpo sublime de un persona muerta en el estado intermedio.

El simbolismo y la estructura básica del mandala Kalacakra también son diferentes en los otros mandalas. Los anillos rodeando el palacio en el mandala Kalacakra son componentes del cosmos: cinco aros/discos grandes soportando el universo, a saber/llamados: espacio, aire, agua, fuego y tierra. En muchos otros mandalas tal referencia al universo no es evidente inmediatamente. Además la distribución de color al interior del mandala: negro en el oriente, rojo en el sur, amarillo en el occidente, blanco en el norte, y verde y azul en el centro difiere de otras tradiciones3. En la tradición Kalacakra las ocho cámaras de tierra, un componente de mucho mandalas son únicamente insinuadas/mencionadas de manera indirecta como ruedas en el aire y círculos de fuego, y no serán descritas en detalle más adelante. Describir las diferencias en detalle significaría alejarse del enfoque de esta publicación. Sin embargo en ocasiones en las que se hace necesario aparece la referencia en las notas al pie.

Se espera que a pesar del enfoque en una única tradición o quizá debido a ello, el misterio del mandala y con él un aspecto fundamental del Budismo Tántrico pueda ser revelado de manera útil al lector.

Budismo Tántrico: un camino corto pero exigente

Desde la perspectiva Tántrica religión y ritual no son/forman la antítesis del ciclo de sufrimiento de la vida sino que por el contrario existen numerosas relaciones entre la práctica religiosa por un lado y las estructuras y procesos en el universo, y en las personas consideradas de manera individual por el otro; lo cual es necesario para entenderlo y utilizarlo activamente. Por lo tanto el conocimiento de la cosmología y antropología Budista Tántrica es indispensable para entender el Tantra Kalacakra y su ritual mandala.

¿Puede un ritual tan complejo como el ritual mandala ser explicado en un solo libro sin cometer serios errores de interpretación? Si aceptamos la perspectiva budista de la relatividad del conocimiento y con ella perspicacia/agudeza de entendimiento/idea de que pueden existir diferentes niveles de entendimiento y verdades relativas de acuerdo a nuestro estado de conocimiento y ‘madurez’, entonces es seguramente válido presentar tal libro sabiendo perfectamente que los puntos de vista particulares de los autores revelan algunas cosas mientras dejan otras en la oscuridad, o probablemente siquiera las alteran. Explicar que la verdad ultima del Budismo Tantrico está relacionada con el ‘vacio’ (ver capitulo 2), y que al igual que el complejo sendero (yoga divinidad/esencia divina) que lleva a éste (ver capitulo 5), es como caminar en la cuerda floja. Es cuestión de aproximarse a algo que no puede ser captado en palabras, algo que quien busca
Publicó: David Chacon

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